ARGUMENTA QUE ES UNA DE
LAS MEDIDAS ESTABLECIDAS EN EL DICTAMEN DE LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS
HUMANOS
El 1 de mayo fue retirada la casilla de Prefectura Naval que le
brindaba protección a María Millacura y su familia en el Pasaje Los Andes.
El Estado nacional retiró
hace cinco días la casilla de vigilancia de Prefectura Naval ubicada en el
Pasaje Los Andes, que tenía como finalidad custodiar el domicilio de María
Leontina Millacura Llaipén, la madre del desaparecido Iván Torres.
María Millacura
argumenta que con el retiro de esa casilla se está incumpliendo la sentencia de
la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que además de fallar contra el
Estado argentino por la desaparición forzosa del joven -ocurrida durante 2003
en Comodoro Rivadavia con la presunta participación de personal policial de la
Seccional Primera-, exige que se garantice la seguridad de sus familiares.
Verónica Heredia,
abogada de Millacura reclama la reposición del personal de seguridad porque
entiende que “existe riesgo cierto, grave e inminente, que esos mismos hechos
le sucedan a la señora María o los hermanos o sobrinas de Iván”.
La abogada de Millacura,
Verónica Heredia, indicó que “si bien la Corte Interamericana decidió levantar
las medidas provisionales, el propio Estado, a través de la Secretaría de
Derechos Humanos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, consideró la
conveniencia de mantener esas medidas de seguridad”.
Sin embargo, Heredia
argumenta que ese compromiso fue
incumplido y que a partir de ello se solicitó a la Corte Interamericana de
Derechos Humanos que adopte nuevamente las medidas provisionales.
Recordó que durante
estos años han fallecido -algunos de ellos en extrañas circunstancias- varios
amigos y testigos del proceso de detención de Torres, entre ellos Diego Alvarez,
David Alberto Hayes, Dante Caamaño,
Miguel Angel Gajardo, Walter Mansilla, Juan Pablo Caba y Gastón Vara.
Por ello reclaman que la
Corte adopte nuevamente las medidas provisionales a favor de Millacura y su
familia como también a favor de Miguel Angel Sánchez, hoy único testigo vivo
que estuvo detenido con Torres en la Seccional Primera de Policía entre octubre
y noviembre de 2003.
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