Más de 5000 personas salieron a las calles a manifestar un contundente repudio a las agresiones sufridas ayer por los docentes que bloqueaban el acceso a la destilería de Plaza Huincul. Ahora la iglesia mete la cola, y se ofrece como mediadora en el conflicto.
La del virnes fue la manifestación más grande desde iniciado el conflicto, a principios de marzo, y tuvo el respaldo de varias delegaciones docentes que viajaron desde el interior de la provincia.
Los trabajadores del sector salud nucleados en ATE y el ministerio de Acción Social, se sumaron al repudio en el contexto del paro lanzado el jueves por la CTA, apenas conocidos los incidentes.
El secretario general de ATEN, Marcelo Guagliardo, dijo que el jueves "se pudo ver al Estado convertido en una patota". Expresó que los violentos "no fueron trabajadores de la UOCRA", sino que se trató de "una organización parapolicial que cuenta con el respaldo de la mesa sindical Sobisch Presidente", en referencia a las organizaciones oficialistas, entre ellas el gremio de la construcción que tuvo una postura al menos ambigua en todo el conflicto.
Foto: rionegro.com.ar
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