19 jun 2006

Benetton gana, mapuches pierden y pierde también Argentina sus riquezas naturales


Un juez de Chubut falló el lunes por la noche contra Atilio Curiñanco y Rosa Rúa Nahuelquir, una pareja mapuche que había ocupado el predio en 2002 con sus cuatro hijos. Los indígenas deben renunciar a esas tierras pues pertenecen a la Compañía de Tierras Sud Argentino, dueña de 970.000 hectáreas en la zona y controlada por la corporación italiana de la vestimenta Benetton, según el fallo. La familia mapuche había presentado un pedido al Instituto Autárquico de Colonización (IAC) de Chubut para ocupar un terreno fiscal en el área que habitaron sus ancestros. Tras seis meses de trámites sin respuesta oficial formal, ocuparon el predio, araron y sembraron, repararon alambrados, comenzaron a criar ganado y levantaron una vivienda precaria.


Según Curiñanco, la familia presentó su proyecto por escrito al IAC, y éste los autorizó "de palabra" a instalarse en agosto de 2002. Pero dos meses después, una docena de policías, armados y con perros, irrumpió en el terreno, en la zona de Leleque, y los desalojó, argumentando que pertenecía a una finca del grupo Benetton.

La empresa demandó penalmente a la familia por resistir el desalojo, e inició otra querella para definir la cuestión de la propiedad de la tierra. Los Curiñanco-Rúa Nahuelquir rechazaron los intentos de acuerdo extrajudicial iniciados por la compañía. Aunque fueron sobreseídos en el proceso penal, perdieron el juicio por la ocupación del predio.

El portavoz de la compañía, Alberto Mazzucchelli, sostuvo que "ahora el gobierno nacional y el provincial tendrán que abocarse a solucionar el problema de vivienda de la comunidad mapuche. Nosotros somos una empresa que otorga principalmente puestos de trabajo", subrayó.

El caso había despertado expectativa, convertido en prueba del cumplimiento de los derechos indígenas consagrados en leyes provinciales y en la Constitución de este país de 37 millones de habitantes, con una población aborigen de entre 800.000 y dos millones de personas, según estimaciones no oficiales.

Las normas nacionales garantizan a los indígenas "la posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan" y aseguran que "ninguna (de esas tierras) será enajenable", según reza la carta magna. Pero la justicia avaló el violento desalojo de los mapuches, en el cual fueron detenidos y se les secuestraron sus herramientas de labranza (el arado y la yunta de bueyes).

Y ahora otorga la "restitución definitiva" de las tierras a Benetton, tomando como base de la sentencia un registro catastral que data de 1896, cuando los mapuches de esa zona del país resistían una campaña militar conocida como la "conquista del desierto".

1 comentario:

  1. TE CREO, ESTE DELITO SOCIAL ES ESCÁNDALOSO EN TODO ÁMBITO QUE TRANSGREDE TODO PRINCIPIO E IDENTIDAD DEL SER HUMANO QUE LUCHA POR RESTABLECER TODO ACTO QUE VIOLA EL DERECHO HUMANO UNIVERSAL EN CHILE SUCEDE LO MISMO Y NADIE ES ESCUCHADO SE HACE OIDOS SORDOS A ESTO QUE ES DOLOR LACERANTE PARA NUESTROS PUEBLOS.
    CAROL.

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