Audiencia por el Arroyo Golondrinas

La opinión de un vecino en primera persona

Por Daniel Zuliani

Hay situaciones muy difíciles de entender, por lo menos desde este sistema institucional y cívico, que no reniego de él, muy por el contrario, aprendo y educo a mis hijas para cumplir paso a paso con todo lo que las instituciones requieren y merecen, pero parece que hay algo que no funciona.Ayer, martes 13 de marzo (paradójicamente, también fue "martes 13" el pasado febrero) se cumplió un mes que el Arroyo Golondrinas de Lago Puelo dejó de correr, como la hacía por siglos, hacia su desembocadura con el río Azul, después que un empresario cabañero lo dragara en forma brutal, sin permiso ni proyecto alguno.

Un arroyo público, un curso de agua, un patrimonio, un BIEN COMUN, que increíblemente un intendente al ver la situación expresa "...es un desastre, pero no tengo jurisdicción sobre el arroyo" con una expresión de alguien que abre sus manos para dejar caer una objeto caliente. O tan insólita como la expresión del titular de Recursos Hídricos cuando le informo ese día que el arroyo se había secado y él me responde ".....que raro" . O cómo contarte lo que sentí cuando un funcionario provincial de la Secretaría de medio Ambiente me preguntaba en forma de una indagatoria a un preso de un penal " por que cree UD, Sr. Zuliani que esto es un daño ambiental?......." " ...le parece a UD que esto es un daño moral?

El jueves 9 de marzo era la fecha fijada por el Dr. Criado para la audiencia pública en el juzgado de Esquel, a la que asistimos 15 vecinos costeándonos los gastos, dejando obligaciones y familias que cuidar, pero el Sr. Kritz, imputado por calificación legal provisoria de USURPACIÓN DE AGUAS CON AGRAVANTE DE USO PÚBLICO, falto a la cita. Ahora habrá que ver qué pasa con la nueva fecha fijada para el viernes 16 de marzo, fecha de la nueva audiencia, que esperamos no sea prorrogada por algún nuevo artilugio de la defensa.

Asombro, zozobra, tristeza, fueron las palabras que alguna vez utilicé para poder describir lo que veía aquel martes de febrero cuando una inmensa máquina descuartizaba y mataba el cauce del arroyo. Hoy ya no tengo frases para decirte lo que siento al ver que no hay más agua, ni peces, ni garzas brujas ni tampoco patos, pero sí tengo el alma inundada de una inmensa desazón al ver el fantasma de la impunidad caminando sobre las piedras secas de lo que alguna vez fuera el Arroyo Golondrinas.

Foto: El propietario del complejo turístico Puelo Ranch desvió el Arroyo Golondrina.

Fuente: www.puertae.com.ar