El martes se realizó en Sarmiento el juicio oral y público contra tres policias acusados por los delitos de vejaciones, privaciones abusivas de la libertad y falsificación de instrumento público.
En tanto en Esquel, el martes próximo se conocerá la sentencia del Tribunal, en el marco de un juicio que tiene por imputados a cinco policías. El Fiscal solicitó la absolución de uno de ellos y la condena de los otros cuatro. La querella adhirió al pedido y el Defensor solicitó la absolución, señalando que solo se hizo uso de la fuerza legal. Las víctimas son tres hombres detenidos en El Maitén en febrero de 2008, vinculados a otro delito por el que fueron condenados en juicio abreviado. La particular situación es que en el proceso anterior ellos fueron acusados por la Fiscalía, en tanto que, por entender que el proceder policial que rodeó la detención fue irregular, ahora la misma Fiscalía los representa en tanto presuntas víctimas del accionar policial.
SARMIENTO
Ayer en la Oficina Judicial de Sarmiento se llevó adelante la audiencia de debate oral y publico contra tres empleados policiales identificados como Fernando Bonifacio (38), Cristian Toledo(24) y Martín Pedraza(34), imputados como presuntos co-autores del delito vejaciones, a los que se le amplio la acusación por los delitos de falsificación de instrumento publico y privación abusiva de la libertad.
El juez Alejandro Rosales solicito a la Fiscalía la lectura de la acusación publica, la cual indica que los hechos se registraron el día 27 de abril, aproximadamente a las 6, en inmediaciones del puesto sanitario de la localidad Dr. Ricardo Rojas, donde el denunciante, habría concurrido para acompañar a dos mujeres que requerían asistencia medica, en función de que habían sido rociadas con un gas que produce irritación a la vista.
En sentido se supo que hasta el puesto sanitario, llegaron los imputados y sin motivo legitimo habrían agredido y lesionado a la victima, para luego conducirlo a la rastra hacia la comisaría de la localidad donde lo introducen en el calabozo y permanece allí esposado, hasta las 10 de la mañana, donde luego fue trasladado a Río Mayo, para certificar sus lesiones.
Los Fiscales señalaron que durante el juicio se comprobaría que los acusados fueron autores penalmente responsables del delito de vejaciones.
Ayer en la Oficina Judicial de Sarmiento se llevó adelante la audiencia de debate oral y publico contra tres empleados policiales identificados como Fernando Bonifacio (38), Cristian Toledo(24) y Martín Pedraza(34), imputados como presuntos co-autores del delito vejaciones, a los que se le amplio la acusación por los delitos de falsificación de instrumento publico y privación abusiva de la libertad.
El juez Alejandro Rosales solicito a la Fiscalía la lectura de la acusación publica, la cual indica que los hechos se registraron el día 27 de abril, aproximadamente a las 6, en inmediaciones del puesto sanitario de la localidad Dr. Ricardo Rojas, donde el denunciante, habría concurrido para acompañar a dos mujeres que requerían asistencia medica, en función de que habían sido rociadas con un gas que produce irritación a la vista.
En sentido se supo que hasta el puesto sanitario, llegaron los imputados y sin motivo legitimo habrían agredido y lesionado a la victima, para luego conducirlo a la rastra hacia la comisaría de la localidad donde lo introducen en el calabozo y permanece allí esposado, hasta las 10 de la mañana, donde luego fue trasladado a Río Mayo, para certificar sus lesiones.
Los Fiscales señalaron que durante el juicio se comprobaría que los acusados fueron autores penalmente responsables del delito de vejaciones.
Por su parte el abogado defensor Guillermo Iglesias afirmó que el Ministerio Público Fiscal no podría pobrar los hechos la existir una discordancia entre los hechos que imputa y los que quiere acreditar, por lo que iba a solicitar que se le impongan las costas del proceso a la Fiscalia y al denunciante.
A su turno el acusado Oficial Principal Martín Pedraza utilizó su derecho de declarar y mediante la lectura de un extenso texto a lo largo de 45 minutos fue explicando su versión de los hechos.
En este sentido, el acusado indicó que habían acudido al lugar con otros cinco uniformados por un llamado telefónico efectuado por la enfermera del puesto sanitario a raíz de un incidente que sucedía en el lugar.
Según el imputado al llegar al puesto pudo observar que el denunciante agredía físicamente a otra persona por lo que decidió intervenir tratando de separarlos y recibió un golpe en su rostro y una patada que le provoco una lesión y su caída al piso.
Asimismo, el comisario de Paso de Indios sostuvo que logró reducir y esposar al denunciante y en esa intervención fue agredido por un menor que luego se dio a la fuga. Así las cosas señaló que también otras dos personas fueron llevadas detenidas por intentar impedir el procedimiento policial.
Por ultimo manifestó que se sentía perseguido y habría recibido mala atención por parte del Fiscal Raúl Coronel y el funcionario de Fiscalia Julio Herrera quienes lo habrían tratado de pendenciero y problemático. En la oportunidad también declararon el agente Toledo y el Sargento Bonificacio, y otro uniformado que participó del procedimiento, quienes sostuvieron una versión similar a la de superior.
LOS TESTIGOS
El primer testigo citado en el juicio fue el denunciante, quien indicó que en esa oportunidad había concurrido al bingo bailable de la localidad de Ricardo Rojas junto a su hijo, y al salir encontraron a dos mujeres que les pidieron que las lleven al puesto sanitario porque habían sido rociadas con un gas en la vista. Según indicó la victima, la enfermera no habría querido asistir a las mujeres por lo que se generó una discusión con otro hombre que estaba en lugar.
Asimismo indicó que al llegar los uniformados, se habría acercado a consultarles porque habían utilizado ese gas irritante contra las mujeres y recibió como respuesta la aplicación de gas en la vista, la colocación de las esposas y fue llevado a la rastra hasta el calabozo de la comisaria local, ubicado a dos cuadras del lugar, donde permaneció esposado hasta las 10 de la mañana cuando se procedió su traslado a Río Mayo.
Por último la víctima sostuvo que a raíz de las lesiones sufridas por esta situación permaneció 10 meses con tratamiento por un desgarro en el hombro y debió ser intervenido quirúrgicamente.
También brindaron sus testimonios el hijo de la victima, la enfermera del puesto sanitario y otros dos testigos. En tanto, los profesionales médicos corroboraron las certificaciones presentadas en el juicio.
AMPLIACIÓN DE LA ACUSACION
Antes de la lectura de los alegatos, los Fiscales solicitaron al Juez la ampliación de la acusación, fundamentada en toda la prueba escuchada durante el debate, para imputar al los policías Pedraza y Bonifacio como presuntos autores de los delitos de privación abusiva de la libertad con abuso de sus funciones y falsificación de instrumento publico agravado por su condición de funcionarios públicos.
Asimismo el Ministerio Publico Fiscal informó que pretendía la aplicación de cuatro(4) años de prisión e inhabilitación absoluta por el doble de tiempo de la condena.
A su turno el Defensor Iglesias expresó que no era partidario de las teorías conspirativas pero no le quedaba otra opción que adherir a lo expuesto por su defendido Pedraza, por lo que solicitaba que se rechace la ampliación presentada por Fiscalia.
En este contexto, el Fiscal Coronel señaló que ante las afirmaciones agraviantes del Defensor y del acusado Pedraza, ambos podrían haber pedido la recusación de los Fiscales y utilizar los recursos legales para llevar sus planteos al Consejo de la Magistratura.
En este sentido, el Procurador agregó que Pedraza estaba imputado en varias causas desde el año 1999 en Comodoro Rivadavia, una etapa anterior a que estos funcionarios integraran el Ministerio Publico Fiscal, por lo que se demostraba la falsedad de la teoría conspirativa.
EL MAITEN
En tanto, el martes próximo se conocerá la sentencia del Tribunal, en el marco de un juicio que tiene por imputados a cinco policías. El Fiscal solicitó la absolución de uno de ellos y la condena de los otros cuatro. La querella adhirió al pedido y el Defensor solicitó la absolución, señalando que solo se hizo uso de la fuerza legal. Las víctimas son tres hombres detenidos en El Maitén en febrero de 2008, vinculados a otro delito por el que fueron condenados en juicio abreviado.
La particular situación es que en el proceso anterior ellos fueron acusados por la Fiscalía, en tanto que, por entender que el proceder policial que rodeó la detención fue irregular, ahora la misma Fiscalía los representa en tanto presuntas víctimas del accionar policial.
El juicio dio comienzo el lunes 31 de agosto, y luego de escucharse cantidad de testimonios y llevarse a cabo algunas pericias, este martes se expusieron los alegatos de las partes.
EXCESOS EN EL EJERCICIO DEL ROL FUNCIONAL
El Fiscal, Martín Zacchino, en la introducción a sus alegatos se refirió al tipo de conductas que se están juzgando, en tanto afectación de la libertad de las personas en sentido amplio, incluida la de no padecer situaciones agraviantes innecesarias. También sostuvo que además de la sanción personal al autor del delito, la norma penal persigue una sanción institucional ya que las conductas que reprocha son excesos en el ejercicio del rol funcional.
En relación a la afectación de Derechos humanos, Zacchino señaló que en la actualidad se confunde el significado profundo de la denominación Derechos humanos, “todo el Derecho es humano ya que regula la vida de los seres humanos”, sin embargo esta especial denominación se refiere a resguardos ante el ejercicio indebido, abusivo, del poder estatal.
LOS HECHOS
Todo comenzó una madrugada como tantas otras en El Maitén. Varios parroquianos estaban consumiendo en un bar, entre ellos había una mujer mayor que tenía un tetrabrik de vino. Un sujeto se lo quitó y frente a esta actitud otros tres (foráneos que estaban en el mismo bar) hicieron “justicia por mano propia”. Tomaron al primero y valiéndose de un embudo le hicieron consumir cantidad de bebidas alcohólicas hasta que este perdió la conciencia, lo desnudaron y lo dejaron tirado en la vía pública.
La policía fue alertada, llegó al lugar, llamó a la ambulancia para que reciba inmediata atención la víctima y, luego de los datos brindados por una testigo, un grupo de policías ingresaron al local para aprehender a los presuntos agresores. Lo que ocurrió a partir de ese momento se conoce a partir de diferentes versiones: las de los testigos, las de los policías y las de aquellos que en ese momento fueron detenidos como imputados y finalmente condenados luego de haber confesado su responsabilidad en el hecho de lesiones graves en el marco de un juicio abreviado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario