10 jun 2006

El 80 % de la Patagonia está afectada por la desertificación


La Patagonia es reconocida en el mundo por la singularidad y atractivo de sus ambientes naturales. Sin embargo, un 80 % de la superficie de la región sufre procesos de deterioro. Esto representa un gran desafío para conservar y mejorar la calidad ambiental. Dos características han coincidido para llegar a esta situación: la fragilidad de los ecosistemas de la región y el desarrollo de las actividades económicas. Los principales problemas que se presentan son derivados del sobrepastoreo, la extracción de leña, la explotación minera e hidrocarburífera, los incendios y la construcción de obras de infraestructura. Un relevamiento topográfico realizado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), demostró que d e los 780 mil kilómetros cuadrados que pertenecen a la región patagónica el 80 por ciento de su extensión presenta signos graves de degradación, lo que significa que un tercio de ese territorio es un desierto estéril.
Según el mapa mundial elaborado por las Naciones Unidas, la Argentina se encuentra seriamente comprometida en el proceso de desertización. En la Guía Ambiental de la Argentina, de Fernando Juan Del Giudice, que refleja los resultados del documento "El deterioro del ambiente en la Argentina" elaborado en 1988 por la Fundación para la Educación de la Ciencia y la Cultura, vemos que sobre un total de 228.179.000 hectáreas relevadas correspondientes a 18 provincias (el 80 % del país) 25 millones de hectáreas están afectadas por erosión hídrica y 21,4 millones lo están por erosión eólica.
El INTA es uno de los organismos que ha trabajado fuertemente en el diseño de herramientas que permiten actuar en las áreas más afectadas, sin embargo, el organismo nunco logró la inversión sostenida por parte del gobierno en los programas. En el caso de Chubut era una Fundación Alemana la que financiaba los trabajos de recuperación de suelos en la zona de Río Senguer.
En este marco se debe recordar, que la Patagonia es una de las regiones con mayores reservas de agua dulce del mundo, siendo abundante en la zona cordillerana, escasa en la estepa, y base de la riqueza en la zona de los valles. Por ello es preciso desarrollar y adoptar tecnologías para cuidar su calidad y hacer un uso eficiente de ella en cada uno de los ambientes ya que el agua será en un futuro cercano, la principal limitante para el desarrollo humano.

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