Los habitantes de Sarmiento y los trabajadores del Hospital pidieron ayer respuestas urgentes a la necesidad de una ambulancia, aumento salarial para los trabajadores y recategorización, insumos y nombramiento de profesionales. Después de tres días de toma pidieron la renuncia del director interventor, Jorge Salazar y en asamblea eligieron a la nueva directora, Dora Gallo.
Hace dos meses que la comunidad y los trabajadores del Hospital Rural de Sarmiento pedían respuestas a la falta de insumos, profesionales, a los sueldos bajos del personal, y la falta de ambulancias; pero no llegaban. Ayer la situación estalló. Recibieron una nota de la secretaria de Salud, Graciela Di Perna, que según los trabajadores: "nos agravió diciendo que somos unos vagos. Esto es indignante porque nosotros estamos acá todo el año. Repudíamos el sistema con el que nos quiere hacer trabajar más horas por la misma plata. Encima somos discriminados por trabajar en un Hospital Rural, porque los trabajadores de acá no reciben aumentos hace años mientras que los de los hospitales grandes si los reciben", dijo uno de los enfemeros que participó de la asamblea. Pero los vecinos también agregaron su visión sobre el tema: uno de ellos afirmó que tienen un hospital que responde a la atención de 4.000 personas cuando actualmente son 14 mil, más las poblaciones cercanas como Buen Pasto, Lago Blanco, Facundo, Ricardo Rojas, Río Senguer, entre otras.
Reunidos en asamblea ayer a la tarde decidieron levantar la toma, pero afirmaron que si la ambulancia no llega mañana, como prometió el director del área programática, José Luis Corominas, buscarán la forma de manifestarse sin romper con la veda electoral. En tanto el director saliente, Salazar, sostuvo que él hizo todo lo que estaba a su alcance. "Pero todo lo que le pedía al área programática nunca me lo dieron, pero si se lo dio a una asamblea, después de que pidieran mi renuncia, lo que demuestra que los canales normales para ellos no sirven. Estoy muy dolido con esta situación", afirmó. En tanto, Gallo en calidad de directora entrante sostuvo que "sé que las cosas que se están pidiendo no se resolverán en lo inmediato por eso la lucha no termina acá, seguirá hasta que tengamos respuestas. Yo lo que pedí es que no me dejen sola, porque sola no voy a poder hacer nada". Por eso en asamblea también se conformó una junta asesora".
En la asamblea estuvo presente el intendente, Ricardo Britapaja, el jefe comunal de Buen Pasto, los concejales del partido vecinal; y unos 300 vecinos.
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